domingo, 21 de junio de 2009

ORBITAL EN EL SONAR 2009: CUANDO LA REALIDAD SE PARECE AL CINE
















Pudiera hoy ser acusado de apartarme del guión del blog. Pero cuando la realidad se parece al cine al punto de hacer dudoso si uno está a uno u otro lado de la pantalla, el relato de lo acaecido no dista en exceso de la crítica a una película. Y eso fue lo que sucedió esta pasada madrugada en el concierto con el que Orbital culminó la edición 2009 del Festival SONAR en Barcelona. Un prodigioso espectáculo audiovisual que rindió a sus pies a los miles de fanáticos de los hermanos Hartnoll que nos congregamos para contemplar en directo al dúo más brillante y creativo de la historia de la música electrónica. Uno de sus instantes, capturado cámara en mano, encabeza, por ello, el post de hoy.

Para los devotos de los Orbital, pues, esta madrugada la realidad se volvió cine en directo, con lluvia sobre el film de todos los Oscar imaginables.

jueves, 18 de junio de 2009

TROPIC THUNDER: PROBLEMAS DE CREERSE GRACIOSO


















Aun recuerdo bien el tremebundo montaje promocional de "Tropic Thunder" que este verano copaba los mejores espacios de Times Square, Nueva York. Así que a la vista del despliegue, uno podría creer que asistía al estreno de un auténtico "crack" del género de la comedia, tipo "Aterriza como puedas" o similar.

Pues va a ser que no. "Tropic Thunder" es un producto 100% Ben Stiller, a cargo del guión y la dirección. O sea, que lo que desfila por la pantalla es pura emanación en celuloide de la personalidad del sujeto. Y ahí radica el problema, pues el amigo Stiller no deja de tener su gracia, pero, desde luego, mucha menos de la que él cree. Así que prepárense ustedes a encajar una retahíla de "gags" que haran troncharse de risa al autor del producto, pero dejarán con cara de póquer al común de los feligreses. Además, y a poco que hayan seguido un poco los anteriores films de Stiller, la mayor parte del material sonará a trillado.

Así que "Tropic Thunder", una película filmada para hacer reír, no hace, en realidad, excesiva gracia. La Providencia, pues, da pan a quien no tiene dientes, aunque, al menos, no a cargo de los sufridos contribuyentes, como pasa por estas latitudes con los "genios" del humor, cuyas presuntas gracias deben tener ya epígrafe propio en los Presupuestos del Estado.

sábado, 13 de junio de 2009

TERMINATOR SALVATION: DE "SALVATION" NADA


















¿Qué idea puede llevar a una productora a confiar la dirección de la última entrega de Terminator al artífice de "Los Angeles de Charlie"? Pues una y sólo una, amigos: recaudar. Y no dice Deep que haya de condenarse tal empeño. Sólo el estar dispuesto a pagar cualquier precio en pos de él. Como, por ejemplo, destrozar toda expectativa sobre la continuidad de una mítica saga con un producto de ilimitada estulticia, cuyo guión parece haber sido escrito al tiempo que se rodaba.

Si se ponen en relación los medios utilizados con el resultado, "Terminator Salvation" es, de largo, la peor película del año, apoyada en unos intragables actores (con la cara marmórea de Christian Bale a la cabeza del engendro), un guión a la altura de una redacción escolar y una dirección más gris que un día nublado. ¿Cuál es el problema? ¿Por qué astronómicos presupuestos no alimentan películas estimulantes e inteligentes, como las dos entregas previas a cargo de James Cameron? Sencillamente, porque los proyectos que hoy se llevan a la pantalla son controlados por tipejos a quienes del cine sólo les importa lo que el sufrido feligrés deja en taquilla, ajenos a un mero atisbo de respeto o admiración por el imaginario del que se valen para sus lucrativos fines.

De "salvation", pues, nada. El producto degenerado que hoy nos ocupa debe descender directamente al infierno de los bodrios, sin parada en el Purgatorio. Y es deber de quienes tuvimos la fortuna de presenciar en la gran pantalla como James Cameron daba vida en 1.985 a uno de los iconos del cine fantástico contemporáneo, el quedarse con su imborrable recuerdo y evitar que desperdicios como éste mancillen su memoria.